Ropa interior limpia y cómoda: Asegúrate de llevar suficiente ropa interior limpia y cómoda para tu estadía. Opta por prendas que no sean ajustadas y que sean fáciles de poner y quitar.
Ropa cómoda: Lleva ropa suelta y cómoda, como camisetas holgadas y pantalones de jogging. Esto te ayudará a sentirte más relajado durante tu recuperación.
Chinelas o zapatillas: Un par de chinelas o zapatillas cómodas son ideales para moverte por la casa de recuperación. Asegúrate de que sean antideslizantes.
Artículos de aseo personal: Empaca tus artículos de aseo personal, como cepillo de dientes, pasta dental, champú, jabón y desodorante.
Medicamentos y recetas: No olvides tus medicamentos recetados y asegúrate de tener suficiente para toda tu estadía. Lleva también cualquier documentación médica relevante.
Cargador para dispositivos: Lleva contigo el cargador de tu teléfono móvil u otros dispositivos electrónicos que necesites. Mantenerse conectado puede ser reconfortante durante la recuperación.
Libros o entretenimiento: Un buen libro, una tableta con películas o música, o cualquier forma de entretenimiento que disfrutes puede hacer que tu tiempo sea más agradable.
Almohadas y mantas: Aunque la casa de recuperación proporcionará ropa de cama, a menudo las personas prefieren sus propias almohadas o mantas para mayor comodidad.
Documentos e identificación: Lleva contigo tu identificación, tarjeta de seguro médico y cualquier otro documento importante.
Lista de contactos de emergencia: Ten a mano una lista de números de teléfono de familiares y amigos en caso de que necesites ayuda o apoyo durante tu recuperación.
Ropa para la salida: Si tu estadía en la casa de recuperación es temporal, asegúrate de tener ropa adecuada para el día en que te den el alta médica.
Dinero y tarjetas: Asegúrate de tener suficiente dinero en efectivo y tarjetas de crédito o débito para gastos personales o imprevistos.
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